Los convocantes de las concentraciones catalanas en la AP-7 y la N-II han propuesto continuar las movilizaciones a otras regiones “que puedan tener mayor repercusión internacional”.

Este llamamiento aconteció después del desalojo en el puesto fronterizo de La Junquera (Girona) desde primera hora del lunes 11 de noviembre. Por ahora no hay indicios de ningún problema con la Ertzaintza.

La Federacion presidida por Julio Villaescusa remarca la diferencia de actitud entre el gobierno catalán y el vasco, en el que la pasividad prima en el Gobierno Catalán mientras que en el Vasco se hace un llamamiento por la “libertad de tránsito y la libertad económica”. En tal caso, Josu Erkoreka, portavoz del Gobierno vasco ha determinado que “ningún Gobierno va a ser partidario de tomar decisiones y adoptar medidas que bloqueen el tránsito, la libertad de movimiento y el tráfico económico”.

Por esta frontera pasan diariamente unos 18.000 camiones exportando a Europa el 40% de las mercancías que salen de nuestro país.