Desde el día 12 de Agosto, los profesionales del transporte de mercancías peligrosas de Portugal han comenzado una nueva huelga Indefinida que tendrá efectos sobre el abastecimiento de combustible en el país.

Tras cuatro meses de la anterior huelga en el sector del transporte por carretera de Portugal, que provocó graves problemas de abastecimiento en el país dejando gasolineras totalmente sin combustible, las organizaciones de transporte del país vecino decidieron parar y comenzar una nueva huelga.

Esta huelga viene precedida por que se cumpla el acuerdo firmado en la anterior huelga, la cual reconoce los aumentos salariales para los transportistas. Ante esta nueva huelga el Gobierno portugués ha puesto en marcha varias medidas para mitigar los efectos de la paralización y evitar que se repita el colapso vivido en abril. El país vecino, tiene reservas de combustibles para 3 meses, pero el gran problema no es el combustible, es el abastecimiento a las gasolineras, por ello se ha establecido unos “servicios mínimos” del 100% para aeropuertos, puertos y servicios de seguridad, bomberos y emergencias médicas, del 75% para transporte público y del 50% para el resto. Además de todo esto el país se encuentra en estado crítico por alerta por emergencia social.
Ante esta situación las fuerzas y seguridad del país y militares se han preparado para que actuen en caso de que no se cumplan los servicios mínimos pudiendo abastecer en todo momento a la ciudadanía, además el gobierno no descarta en actuar legalmente sobre la huelga si fuese necesario y poder asegurar el funcionamiento de los servicios básicos.

Todo ello ha llevado a que se disparen las ventas de crudo, ya que la ciudadanía se ha visto obligada a abastecerse llenando las gasolineras del país formando grandes colas, generando un aumento del 100% en las ventas de combustible con respecto al mismo periodo. También está aumentando la afluencia de portugueses a gasolineras españolas al otro lado de la frontera, donde además el precio del combustible es más barato.