A la hora de comprar o adquirir nuestro vehículo, debemos ser conscientes de los cambios que van acaeciendo en la legislación competente, ya que cualquier novedad que no hayamos tenido en cuenta, nos puede suponer desde un susto a una sanción grave.

A lo largo de todos estos años, hemos pasado por varios cambios sustanciales en nuestro Reglamento que van desde la instalación de sistemas de frenado de emergencia hasta las señales de cambio de carril. Todos y cada uno de ellos fomentando la seguridad y prevención de los conductores. Todos estos cambios deben programarse antes de una fecha concreta para habilitarlas en los vehículos que deben ser homologados y a su vez, limitar la matriculación a aquellos que no cumplan con las Directivas y Reglamentos.

 

En este caso, hablamos del tacógrafo. Lleva años siendo obligatorio en el transporte de mercancías y gracias al Reglamento (UE) 165/2014, hemos comprobado los cambios que se han implementado para su uso.

El Reglamento anterior, ha instaurado un tacógrafo digital de segunda generación o también llamado “inteligente”, que permite conexión GNSS (Sistema Mundial de Radionavegación por Satélite).

Según el Ministerio de Fomento, el tacógrafo digital “dispone de una apariencia similar al tacógrafo analógico. El sistema consta de una unidad de vehículo, un sensor de velocidad/distancia y las tarjetas de tacógrafo”.

Los discos del tacógrafo se han sustituido por tarjetas inteligentes, las cuales almacenan toda la información del conductor, empresa, etc.  A grandes rasgos, toda la información que vamos a disponer del tacógrafo inteligente sería igual que el anterior, pero con la salvedad de que esos datos serán “prácticamente imposibles de manipular”.

Los artículos 8, 9 y 10 del Reglamento (UE) 165/2014 determinan que, a partir del 15 de junio de 2019, todos los vehículos que sean matriculados deben llevar obligatoriamente el nuevo tacógrafo digital.

Por tanto, hay que tener en cuenta que es importante prevenir y preparar la carrocería junto con el chasis antes de ese plazo ya que, si se nos hace tarde, habrá que sustituir el tacógrafo. Es tedioso y para nada económico. No existen moratorias ni aplazamientos y por lo tanto es hora de revisar la planificación de nuestra compra.